El 80% del trabajo forzado ocurre en el sector privado en la economía lícita, en la agricultura y horticultura, construcción, industria textil y de manufactura, hotelería y servicios, minería e industria forestal, pesca industrial, procesamiento y envasado de alimentos, transporte, servicio doméstico y otros trabajos de cuidado y limpieza, y en la industria sexual y prostitución.
Por ello, desde Libera ONG creemos que es necesario que la constitución reconozca el nuevo paradigma del Derecho de entender que somos un sistema interconectado e interdependiente y que, consiguientemente, todos cumplen un rol en la mantención y nutrición de nuestras comunidades de vida, incluidas y muy especialmente, las empresas. Se debe recoger la noción de una responsabilidad social exigible a todos los actores sociales para el goce pleno de los derechos.